¿Por qué las cajas registradoras siempre están a la izquierda de la entrada? ¿Qué hace el pollo frito junto a la puerta? ¿Por qué nos detenemos siempre al final del pasillo? Nuestra psicología es explotada comercialmente por los supermercados.
Los primeros supermercados llegaron a España en los años sesenta. Ya no había que esperar a que un tendero, detrás de una mesa, estuviera despachando productos. Era más divertido pasear con un carro por pasillos repletos de comida, bebidas y toda clase de productos. Luego vinieron los hipermercados, donde todo estaba expuesto a lo grande. Todas estas empresas han desarrollado una fina psicología del comprador de supermercado. He aquí algunos ejemplos:
Cabeceras
Solemos fijarnos más en las cabezas de los lineales. Instintivamente pensamos que ahí hay ofertas. Pero no necesariamente lo son. Si usted quiere encontrar productos a buen precio, búsquelos por los pasillos. (Las marcas pagan más por estar en las cabeceras y a veces nos cobran más).
Situación
Los productos más consumidos suelen estar al fondo de la tienda. Pan, leche, verduras, huevos… Así nos obligan a dar más vueltas por los pasillos, y enamorarnos de otros productos.
Sin redondeo
El número preferido de los supermercados es el 9. Los precios son 3,99, 14,99, o 29, 99. Nunca números redondos. Así da la impresión de que es más barato. Pocas veces veremos múltiplos de 5 (por ejemplo, 10, 15, 20, 25…), o múltiplos de 10. Siempre un céntimo menos, lo cual nos hará pensar que nos estamos ahorrando un euro. Si tienen dudas, consulten las ofertas en las webs de los supermercados e hipermercados.
Hoy aquí mañana allí
¿Dónde está mi mermelada? La han cambiado de sitio. Muchos supermercados cambian de sitio los productos para que usted dé vueltas y compre más productos. También sirve para ayudarle a "probar" cosas nuevas. El ser humano tiene un fondo juguetón y experimental. Así nos enganchamos a más productos.
Luces de discoteca
En la zona de panes, se emplean luces amarillas, pues nuestra vista la asocia a trigo recién horneado. En la de carnes, luces blancas. Así se destacan más las propiedades de los productos.
Caramelos
Las golosinas siempre están al lado de la cajera y a la vista de los niños. Es el momento en que los niños están más tiempo expuestos a la necesidad de consumir azúcar pues, hasta entonces, usted les había alejado de las "zonas de peligro" cada vez que le pedían chuches. Ahora es inevitable. ¿Qué padres van a negar un regalito al pequeño?
Las entradas
¿Por qué, cuando entramos en un supermercado, las cajas están siempre a nuestra izquierda? Porque la tendencia natural de los humanos es ir al fondo, y girar a la izquierda. Poniendo las entradas a la derecha, y las cajas a la izquierda, lo único que hacen los supermercados, es crear entradas y pasillos para satisfacer esa extraña psicología, y evitar zonas muertas.
Tiempo relativo
Cuanto más tiempo pase usted en su supermercado, más cosas comprará. Por eso, muchas tiendas se han reconvertido en "experiencias para los sentidos". Cafeterías, música lenta, el placer de pasear.
Ese olor a pollo
Muchos supermercados ponen sus panaderías o pollerías cerca de la puerta para que usted sienta los olores y entre. ¿Quién puede resistirse al aroma de un buen pollo frito? ¿O un pan recién hecho?
La compra en masa
Pensamos que si compramos un paquete de 12 latas de refrescos nos saldrán más baratos. Puede ser: pero también los consumirá más rápido y volverá al supermercado de igual forma. En cambio, si compra menos unidades, está obligado a consumir menos y gastar menos.
Compare tamaños y precios
No siempre, un frasco de tomate triturado grande es más barato que dos pequeños. Compare precios y cantidades antes de dejarse engatusar por el frasco grande.
Dos por uno
Las superofertas de dos por uno o tres por uno en productos perecederos suelen estar ligadas a la fecha de caducidad. No se deje llevar por estos anzuelos, si no está seguro de consumir esa mercancía en plazos cortos.
Precios altos y bajos
Los productos más caros y menos necesarios suelen estar a la altura de los ojos. Los necesarios, a la altura de los pies, porque siempre los compraremos sin mirar el precio demasiado, como bolsas de basura.
Aproveche las marcas blancas
Detrás de las marcas blancas están las empresas de siempre. Si quiere conocer la lista verdadera, consulte la web http://marcasblancas.wikispaces.com/
Cinco consejos para ahorrar:
1.- No vaya con niños.
2.- Lleve efectivo, olvide la tarjeta, ponga una cantidad fija de gastos y no se pase de ahí. Si no le alcanza, devuelva productos.
3.- Pregúntese: ¿necesito esto o es un capricho?
4.- Antes de salir de casa, verifique sus existencias: no hace falta comprar cosas que ya tenía. Haga una lista y ajústese a ella.
5.- No entre a un supermercado si está muerto de hambre.
Fuente:
http://es.biz.yahoo.com/23042010/232/dejarse-enganar-super.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario